Las sombras de la mente
Las hojas del bosque crujían trituradas bajo los pasos del chico. Había dejado el camino frecuentado por los senderistas, y había decidido perderse entre los árboles viejos y oscuros en búsqueda de un mundo nuevo. El bosque siempre había representado para él un escape del mundo cotidiano. Mientras caminaba, el chico imaginaba criaturas y animales escondidos en las sombras de los árboles.
Cuando sus pies empezaban a dolerle y la luz lentamente se esfumaba del cielo, el chico decidió regresar a su casa, la cual estaba en el borde del bosque. Pero cuando comenzó a correr las criaturas de las sombras le siguieron. Él pudo oírlas y ver sus figuras oscuras corriendo a su lado. Su corazón se aceleró, corría a toda velocidad, pero las figuras se le acercaron. Finalmente, el chico pudo ver la luz al borde del bosque.
El hombre se despertó en el suelo del bosque y le dolía mucho la cabeza. La sangre corría de una de sus cejas y se sintió muy mareado. Se levantó y se golpeó de nuevo la cabeza con una rama. El hombre se aferró a su cabeza con dolor, y cuando miró a su alrededor, descubrió que era más alto de lo que recordaba. Miró su cuerpo y descubrió que en realidad era un adulto.Liam Fidurko, ’22
Las hojas del bosque crujían trituradas bajo los pasos del chico. Había dejado el camino frecuentado por los senderistas, y había decidido perderse entre los árboles viejos y oscuros en búsqueda de un mundo nuevo. El bosque siempre había representado para él un escape del mundo cotidiano. Mientras caminaba, el chico imaginaba criaturas y animales escondidos en las sombras de los árboles.
Cuando sus pies empezaban a dolerle y la luz lentamente se esfumaba del cielo, el chico decidió regresar a su casa, la cual estaba en el borde del bosque. Pero cuando comenzó a correr las criaturas de las sombras le siguieron. Él pudo oírlas y ver sus figuras oscuras corriendo a su lado. Su corazón se aceleró, corría a toda velocidad, pero las figuras se le acercaron. Finalmente, el chico pudo ver la luz al borde del bosque.
El hombre se despertó en el suelo del bosque y le dolía mucho la cabeza. La sangre corría de una de sus cejas y se sintió muy mareado. Se levantó y se golpeó de nuevo la cabeza con una rama. El hombre se aferró a su cabeza con dolor, y cuando miró a su alrededor, descubrió que era más alto de lo que recordaba. Miró su cuerpo y descubrió que en realidad era un adulto.