Varios
Crónicas de Great Brook Valley
El año pasado, estudiantes de Spanish 366, Escritura Creativa en Español, pasaron tiempo con residentes de Great Brook Valley, un complejo de vivienda pública en Worcester, para aprender y escribir sobre sus experiencias durante los disturbios que estallaron allí en 1979. El curso reúne a una amplia variedad de estudiantes de diferentes campos y orígenes, todos atraídos por el deseo de leer, escribir y compartir historias en español. En el aula, ellos desmontan los textos para ver lo que los hace conmovedores: lo que crea un personaje fuerte, una tensión narrativa poderosa, un punto de vista distinto. Pero saben también que las mejores historias se dan más allá del aula, que la verdadera escritura creativa es mucho más que un arte practicado tranquilamente en una biblioteca, un dormitorio, un campus universitario.
La clase colaboró con el Proyecto de Historia Latina de Worcester, una organización dedicada a documentar y compartir las historias no contadas de la comunidad latina de la región. Acompañando al entrevistador Leo Negrón Cruz, los estudiantes tuvieron la suerte de juntarse con activistas latinos que se vieron involucrados, de manera directa o indirecta, en los disturbios de 1979.
Los enfrentamientos ocurrieron en un lugar profundamente ligado a la historia latina de Worcester. Los apartamentos Curtis abrieron en Worcester en 1951 con el objetivo de proveer vivienda asequible a veteranos de la Segunda Guerra Mundial. El complejo de Great Brook Valley Gardens quedó abierto al público dos años después, destinado tanto a los veteranos como a los no veteranos de bajos ingresos. Las dos entidades suelen agruparse bajo la rúbrica de Great Brook Valley (GBV). En abril 1978 Worcester Housing Authority (WHA) estableció un cuerpo policial específicamente para GBV. Un año después, tensiones entre la policía y los residentes, sobre todo los menores de edad, resultaron en una manifestación de protesta enfrente del cuartel de GBV, seguida por un barullo entre jóvenes latinos y la policía. En respuesta, el Concilio de la Ciudad de Worcester formó un panel de ciudadanos para investigar la violencia y las alegaciones de hostigamiento policial.
El 21 de junio de 1979 un policía de Worcester Housing Authority de veintiún años, llamado Hiram Estremera, mató con un tiro por el ojo izquierdo a Ángel Allende-Mojica, de veintiocho años, quien se encontraba detenido y esposado en el asiento de atrás del vehículo policial de Estremera. Al cundir la noticia, manifestantes cercaron el cuartel de GBV, tirando botellas y rocas, hasta poner fuego al edificio. Se solicitaron refuerzos del cuartel de la ciudad de Worcester; hacía falta unos 250 policías en uniformes antidisturbios para dispersar una muchedumbre de unos 400-500. Tres días después, unas mil personas participaron en una procesión funeral y memorial para Allende-Mojica. A fines de junio se formó una nueva asociación de inquilinos—Residentes del Valle Para Mejoramientos (VRI)—para dar una voz a los inquilinos en las decisiones de WHA. También en 1979, la Comisión de Derechos Civiles de la ciudad empezó a copatrocinar una celebración anual llamada Semana Puertorriqueña.
Los estudiantes fueron invitados a pasar tiempo en el hogar de algunos de los vecinos tenaces y perspicaces que han vivido su vida en Great Brook Valley. Se juntaron para escuchar historias sobre su llegada a EEUU., sus primeras impresiones de Worcester y los eventos trágicos de 1979. Escribir no es nunca solo escribir: es también un ejercicio de escuchar. En los perfiles que siguen se puede escuchar y vivir de nuevo las historias que Julie, Freddy y Carmen tuvieron la enorme bondad de compartir.
Las fotos que acompañan los textos pertenecen a los archivos del Worcester Telegram and Gazette y las reproducimos con permiso del Proyecto de Historia Latina de Worcester y Worcester Historical Museum.
Crónicas de Great Brook Valley
El año pasado, estudiantes de Spanish 366, Escritura Creativa en Español, pasaron tiempo con residentes de Great Brook Valley, un complejo de vivienda pública en Worcester, para aprender y escribir sobre sus experiencias durante los disturbios que estallaron allí en 1979. El curso reúne a una amplia variedad de estudiantes de diferentes campos y orígenes, todos atraídos por el deseo de leer, escribir y compartir historias en español. En el aula, ellos desmontan los textos para ver lo que los hace conmovedores: lo que crea un personaje fuerte, una tensión narrativa poderosa, un punto de vista distinto. Pero saben también que las mejores historias se dan más allá del aula, que la verdadera escritura creativa es mucho más que un arte practicado tranquilamente en una biblioteca, un dormitorio, un campus universitario.
La clase colaboró con el Proyecto de Historia Latina de Worcester, una organización dedicada a documentar y compartir las historias no contadas de la comunidad latina de la región. Acompañando al entrevistador Leo Negrón Cruz, los estudiantes tuvieron la suerte de juntarse con activistas latinos que se vieron involucrados, de manera directa o indirecta, en los disturbios de 1979.
Los enfrentamientos ocurrieron en un lugar profundamente ligado a la historia latina de Worcester. Los apartamentos Curtis abrieron en Worcester en 1951 con el objetivo de proveer vivienda asequible a veteranos de la Segunda Guerra Mundial. El complejo de Great Brook Valley Gardens quedó abierto al público dos años después, destinado tanto a los veteranos como a los no veteranos de bajos ingresos. Las dos entidades suelen agruparse bajo la rúbrica de Great Brook Valley (GBV). En abril 1978 Worcester Housing Authority (WHA) estableció un cuerpo policial específicamente para GBV. Un año después, tensiones entre la policía y los residentes, sobre todo los menores de edad, resultaron en una manifestación de protesta enfrente del cuartel de GBV, seguida por un barullo entre jóvenes latinos y la policía. En respuesta, el Concilio de la Ciudad de Worcester formó un panel de ciudadanos para investigar la violencia y las alegaciones de hostigamiento policial.
El 21 de junio de 1979 un policía de Worcester Housing Authority de veintiún años, llamado Hiram Estremera, mató con un tiro por el ojo izquierdo a Ángel Allende-Mojica, de veintiocho años, quien se encontraba detenido y esposado en el asiento de atrás del vehículo policial de Estremera. Al cundir la noticia, manifestantes cercaron el cuartel de GBV, tirando botellas y rocas, hasta poner fuego al edificio. Se solicitaron refuerzos del cuartel de la ciudad de Worcester; hacía falta unos 250 policías en uniformes antidisturbios para dispersar una muchedumbre de unos 400-500. Tres días después, unas mil personas participaron en una procesión funeral y memorial para Allende-Mojica. A fines de junio se formó una nueva asociación de inquilinos—Residentes del Valle Para Mejoramientos (VRI)—para dar una voz a los inquilinos en las decisiones de WHA. También en 1979, la Comisión de Derechos Civiles de la ciudad empezó a copatrocinar una celebración anual llamada Semana Puertorriqueña.
Los estudiantes fueron invitados a pasar tiempo en el hogar de algunos de los vecinos tenaces y perspicaces que han vivido su vida en Great Brook Valley. Se juntaron para escuchar historias sobre su llegada a EEUU., sus primeras impresiones de Worcester y los eventos trágicos de 1979. Escribir no es nunca solo escribir: es también un ejercicio de escuchar. En los perfiles que siguen se puede escuchar y vivir de nuevo las historias que Julie, Freddy y Carmen tuvieron la enorme bondad de compartir.
Las fotos que acompañan los textos pertenecen a los archivos del Worcester Telegram and Gazette y las reproducimos con permiso del Proyecto de Historia Latina de Worcester y Worcester Historical Museum.